- Putin planea incautar y vender los activos de empresas occidentales en Rusia, informó el FT.
- Muchas empresas se han ido de Rusia por la guerra en Ucrania.
- También se están discutiendo planes para nacionalizar algunas entidades, según el informe.
El presidente ruso, Vladimir Putin, firmó un decreto secreto que permite al gobierno ruso comprar los activos de las empresas occidentales a precios de descuento y luego venderlos para obtener ganancias, informó The Financial Times.
La medida se produce después de que muchas naciones occidentales impusieran sanciones a Rusia después de la invasión no provocada de Ucrania, y varias empresas occidentales dijeron que ya no harían negocios allí.
Entre las empresas que cerraron sus operaciones rusas ya se encontraban marcas de renombre como McDonalds e Ikea, informó Insider.
Según la orden firmada por Putin, el gobierno ruso tendría prioridad para comprar activos de empresas occidentales a precios bajísimos, dijo el FT citando fuentes con conocimiento del asunto. Entonces sería capaz de venderlos con una ganancia.
El informe dijo que se están discutiendo medidas aún más duras que permitan la nacionalización total de los grupos.
Según el informe, las medidas están diseñadas para castigar a los países que se apoderan de los activos rusos y recompensar a los que no lo hacen.
A raíz de la invasión de Ucrania, los países occidentales congelaron unos 350.000 millones de dólares en activos estatales rusos, reservas extranjeras y activos de oligarcas, dijo la AFP.
Las empresas occidentales que se quedaron en Rusia obtuvieron ganancias significativas allí, ayudando indirectamente al Kremlin a financiar su guerra. Las empresas occidentales contribuyeron colectivamente con más de 3.500 millones de dólares al Estado ruso en 2022, informó el medio independiente ruso Novaya Gazeta.
Las nuevas medidas firmadas por Putin podrían interpretarse como una forma de dificultar la salida de empresas.
«Si una empresa no cumple con sus obligaciones, entonces, por supuesto, entra en la categoría de empresas malas», dijo al FT el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov. Peskov dijo que algunas firmas occidentales han dejado de pagar salarios o se han ido de Rusia con pérdidas significativas.
«Nos despedimos de esas empresas. Y lo que hagamos con sus activos después de eso es nuestro negocio», agregó.
El gobierno ruso ha tratado de aumentar sus ingresos después de que las sanciones impuestas por la guerra de Ucrania afectaran gravemente su economía. A principios de junio, el gobierno ruso buscó recaudar $ 4 mil millones mediante la imposición de un impuesto sobre las ganancias extraordinarias a las grandes empresas rusas, informó Insider.